Por fin, tenemos actualización de A Man In Love... me gustó este capítulo, me costó trabajo desarrollarlo, pero creo que el resultado estuvo bien. El final se acerca y será especial, todo lo que ha pasado y que pasará valdrá la pena.
Entre otras cosas. El one-shot de Dulce Amor fue muuuy bien aceptado y les agradezco por eso. Algunas de ustedes me pidieron una continuación, ya lo tengo todo pensado. Así que esperemos a saber lo que pasó entre ese lindo niño y su hermoso profesor.
Como siempre. Mil, mil gracias por leer.
<< Capítulos anteriores >>
A Man In Love V
Segunda Temporada
(Siwon x Kyuhyun:: WonKyu)
::: Super Junior :::
No recordaba una
desesperación tan profunda, un odio tan fuerte, simplemente ya no se reconocía.
-Siempre salen a
ese tipo de paseos juntos, ¿verdad? –Siwon asintió con una expresión relajada,
dando un sorbo a su café. –Es curioso que sea más cercano a él que a ustedes.
Debería ser lo contrario ¿No crees?
-Supongo que
sería lo más normal. –Siwon descansó la taza sobre la mesa y limpio la comisura
de sus labios elegantemente. –Gracias por la compañía, Su. Iré a mi habitación
para descansar un rato. –Se puso de pie y abandonó el restaurant.
-Lo hiciste muy
fácil, oppa. –Susurró Su Jin, mientras una sonrisa triunfal atravesaba su
hermoso rostro.
. .
.
Después de
llegar a la habitación, la puerta se cerró detrás de él. Con trabajo se acercó
a la cama, comenzaba a marearse y aunque la molesta sensación llevaba ya varios
días fastidiándolo, esa mañana fue más intenso. Intentaba, deseaba no pensar,
pero entre más esfuerzo hacía, la imagen aparecía dentro de su cabeza, peor
aún, nuevas imágenes se proyectaban. ¿Qué había pasado antes y después de ese
abrazo? ¿Por qué Kyuhyun se veía como si no le importara que estuviera tan
lejos, que llevaran tanto tiempo separado? Mientras él estaba muriendo por tan
sólo abrazarlo y llenarse de su singular aroma.
Las densas
lágrimas recorrieron sus mejillas, dejando húmedos caminos sobre ellas, mordía
su labio inferior para retenerlas, pero el dolor no ayudó, logrando únicamente que un fino hilo
de sangre resbalara por su rasposa y varonil barbilla.
Durante casi un
mes se aferró a la última noche que pasaron juntos, a las palabras que Kyuhyun
le regaló aquella vez, recordando el placer que sintió cuando lo tuvo entre sus
brazos después de esa temporada separados, viviendo con la dulce lujuria que le
producía el recuerdo de esa noche en la que Kyuhyun se entregó a él como pocas
veces lo hacía. Ambos sabían que serían
tiempos difíciles estando separados, Siwon por su parte conocía los planes del
presidente de la SM. ¿Qué pasaría cuando él estuviera en China? ¿Cuánto tiempo
tardaría en contarle a Kyu que su relación era algo imposible o inventar que Siwon
mantenía una relación con una mujer?
Pudo sentir como
todo eso se desmoronaba, su corazón dolía, sentía ganas de gritar, de correr,
deseaba estrellar sus puños contra la pared hasta que el dolor mitigara la
desesperación que lo estaba volviendo loco. Sus ojos se sentían pesados,
mientras parecía que su boca se secaba cada segundo. Y sus lágrimas no cesaban.
Se recostó sobre
su lado izquierdo en posición fetal, agarrando y mordiendo la almohada con
todas sus fuerzas para silenciar sus gritos y sollozos, hasta que su mente se
quedó en blanco, no supo más de él.
. .
.
Regresaron a la
cabaña pasado un rato, comenzaba a atardecer y preferían sólo esquiar durante
la mañana ese día, tenían otros planes para la tarde y noche, primero irían a
vagar por ahí buscando algo delicioso para comer hasta que los dos tuvieran que
regresar rodando al resort, más tarde pasarían la velada delante de la chimenea
acompañados por una gran copa de vino.
Eran exigentes
para la comida, no se trataba de encontrar el restaurant más grande y lujoso,
bastaba con un lugar agradable y una comida digna de Dioses, con eso se
conformarían y así fue. Llegaron hasta un pequeño local donde ordenaron todo lo
que se les antojó, no pasó mucho tiempo para que el lugar pronto se viera
repleto de fans y curiosos que buscaban ver a los cantantes. Se dieron el lujo
de posar para las cámaras y firmar algunos autógrafos, la dueña del local
estaba complacida con eso, varios de los que estaban ahí se acercaron a las
mesas para ordenar los platillos que momentos antes habían pedido los jóvenes.
Satisfechos y
felices caminaron hasta el resort, la idea de rodar hasta allá no parecía tan
mala, o tal vez si, pensando en lo llenos que estaban, podría tener
consecuencias muy malas. Así que siguieron caminando mientras bromeaban y
platicaban. Entraron a la habitación y Kyuhyun se dejó caer sobre uno de los
sillones de la sala soltando un gemido que expresó su cansancio. Changmin se
ocupó de encender la chimenea y buscar lo necesario para la última actividad
del día.
El integrante de
TVXQ descorchó la botella de vino y sirvió las dos copas, llevándolas hasta la
sala, extendió una de ellas a Kyuhyun e hicieron un brindis.
-Estás feliz Kyu…
-Sí, la estoy
pasando bastante bien.
-No, no me
refiero a este momento, estás feliz con él. Puedo verlo en tus ojos, parece que
tienen más vida, brillan más. –Kyuhyun se sonrojó, sabía que era verdad. Estaba
enamorado, perdidamente enamorado del hombre más atractivo, galante, educado y
fascinante del mundo, le abrumaba un poco el hecho de que Siwon fuera tan
perfecto, muchas veces pensó que no lo merecía. Sin embargo adoraba saber que
ese hombre le pertenecía.
-La verdad es
que si, nunca me había sentido tan completo…-La voz de Kyu estaba ronca y un
poco quebrada.
-¿Entonces por
qué esa actitud de ahora? –Changmin pudo ver como un dolor invadió a Kyuhyun.
-Yo, lo extraño.
–Kyu escondió su mirada dirigiéndola a la alfombra.
-¿Es eso? –Changmin
sonrío compasivo. – ¿No se han comunicado desde que se fue a China? –Kyuhyun asintió.
-¿Has intentado llamarle? -Kyuhyun de inmediato observó a su amigo.
-¡NO! No podría,
no quiero interrumpir su trabajo, sabes cómo es con esos asuntos.
-Lo sé, pero
supongo que debe tener algún momento libre por la noche o en medio de las
grabaciones.
-Supongo… -El
puño de Kyu se tensó y mordió su labio, comenzaba a sentir ese cosquillo que da
antes de llorar. –Es … si él quisiera hablarme ya lo hubiera hecho.
-¿Crees que está
molesto? ¿Pasó algo la última vez que se vieron? –Kyuhyun recordó lo que
hicieron esa noche… sí, había pasado que hicieron el amor como un par de locos
desesperados, pero definitivamente eso no pudo haber hecho enojar a Siwon.
-Lo note algo
preocupado, quería que escapáramos o algo así. Fue después de su junta con el
CEO. Creo que no quería viajar a Beijing.
-Entiendo. ¡Tienes
que llamarlo Cho Kyuhyun! ¿Qué harás si él no puede llamarte?
-Pero…
-No, no aceptaré
una respuesta negativa, debes hablar con él, decirle que lo extrañas.-Kyuhyun
llenó sus pulmones y después dejó salir el aire en un extenso suspiro.
-Está bien, pero
necesitaré apoyo.
-Sabes que estoy
contigo, amigo.
-¿Quién habla de
ti? Necesitaré más vino. –Changmin lanzó una mirada al Evil Maknae y terminó
soltando una carcajada.
. .
.
Casi a eso de
las 2:00 am las mejillas de Kyuhyun tenían un ligero color escarlata, Max no
había bebido mucho, pero su rostro también mostraba los efectos del alcohol.
Tambaleándose fue hasta la habitación de Kyuhyun por el móvil. Parpadeando para
ver la hora y al notar lo tarde que era supuso que Choi estaría dormido o por
lo menos descansando de su jornada de grabaciones. Cuando regresó a la sala,
Kyu estaba dormitando sobre el respaldo del sillón. Fue hasta él y le dio un
par de palmadas en la espalda.
-¡Aaaandaa!
Prometiste que lo llamarías. –Le mostró el celular a Cho.
-Naaaah, quiero
dormir…
-Kyuhyun, no
eres un hombre de palabra. -Los ojos de Kyuhyun se abrieron al escuchar eso y
le arrebató el teléfono a Max. No alcanzaba a distinguir los nombres, los símbolos
se movían demasiado, agitó el teléfono para que dejara de hacer eso, pero se
dio cuenta que lo que estaba mal era él. Estaba borracho. Por fin se encontró con
el nombre de Siwon y lo llamó.
-Siwonnie, ¡SIWONNIE!
¿Por qué no has vuelto a casa? Te extraño, te extraño mucho. Ni siquiera me has
llamado, ¡te odio Choi Siwon, te odio!. –El tono de voz de Kyuhyun se convirtió
en gritos llenos de tristeza, era como un niño pequeño que reclamaba eso que le habían arrebatado. –Siwonnie, no tardes mucho. Siwonnie…te amo…
“Usted ha alcanzado el límite del mensaje de voz”
No hay comentarios:
Publicar un comentario